El Fondo de Apoyo a las Familias y a la Infancia, dotado con más de 2 millones de euros, financiará proyectos desarrollados por las entidades locales
La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Violante Tomás, se reunió hoy con los concejales de Servicios Sociales de los municipios de la Región para informarles del reparto de la financiación del Plan Concertado Regional de Atención Primaria 2017, cuya dotación se ha incrementado un 7,2 por ciento este año, al pasar de los 10.083.000 euros en 2016 a los 10.814.000 previstos para este año.
"El plan cubre a toda la población regional, y cada vez son más las personas atendidas y registradas en el Sistema de información de usuarios de servicios sociales", explicó Violante Tomás, quien añadió que "las entidades locales son las que están más próximas al ciudadano y las que mejor conocen sus necesidades".
La atención primaria es una de las piezas clave de los servicios sociales, que está presente en todos los municipios y que garantiza los derechos que en esta materia tienen los ciudadanos. Las entidades locales crean y gestionan estos servicios y la Dirección General de Política Social impulsa y coordina.
La atención primaria incluye el Servicio de información, valoración y asesoramiento a la población sobre derechos y recursos sociales existentes; el de atención en el medio familiar y comunitario; el de inserción social, y el de promoción y cooperación social.
Proyectos para cubrir las necesidades básicas de las personas
Asimismo, en la reunión Violante Tomás presentó a los representantes de los ayuntamientos el Fondo de apoyo a las familias y a la infancia 2017, cuyas ayudas superan los dos millones de euros, y les informó de la cantidad a percibir por cada municipio, teniendo en cuenta la población menor de 16 años. Las entidades locales (ayuntamientos y mancomunidades) deberán remitir sus proyectos a la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, y las ayudas se distribuirán mediante los centros de servicios sociales de atención primaria.
La titular de Familia explicó que "con estos créditos se pueden financiar proyectos dirigidos a paliar y mejorar la situación de vulnerabilidad social de los menores, cubriendo necesidades básicas; de apoyo a la conciliación familiar y laboral, y servicios de intervención familiar.
En concreto, los proyectos de mejora la situación de vulnerabilidad social cubren necesidades básicas de alimentación, higiene o ropa y facilitan el acceso a otros servicios como los de salud, educación (material escolar y ayudas para comedor), vivienda (alquiler y mejora de las condiciones de habitabilidad de la vivienda y suministros, entre otros) y de empleo. Además, incluye acompañamiento y trabajo social con las familias.
Los programas de apoyo a la conciliación familiar y laboral para personas en procesos de inserción socio-laboral con hijos a su cargo cubren gastos de escuelas infantiles, atención de menores, servicios de apoyo complementarios de los servicios normalizados educativos u otros que garanticen el derecho de los niños a una atención y desarrollo adecuados.
Por su parte, los equipos especializados de apoyo familiar proporcionan a las familias el soporte que les permita afrontar los conflictos, permitiéndoles construir relaciones positivas que favorezcan el desarrollo de sus miembros, especialmente los menores.